Ingredientes: (para 4 personas)
Elaboración:
Lo primero que debemos hacer es desalar el bacalao, para ello lo lavamos primero bajo el grifo, lo introducimos en un recipiente con agua, lo tapamos y lo metemos en el frigorífico entre 24 y 48 horas, ya depende del tipo de bacalao y de lo grandes que sean los trozos, cambiándole el agua cada 6-8 horas.
Para la masa de las pavías, picamos muy pequeña la cebolleta y unas hojas de perejil. Las ponemos en un cuenco, añadimos los huevos batidos y mezclamos.
A continuación añadimos la harina de garbanzo junto con la levadura y la cerveza y un pellizco de sal y terminamos de mezclar hasta que se integren bien todos los ingredientes. Ha de quedar una masa cremosa, ni muy espesa ni muy clara.
Por último, cortar el bacalao en bastones no muy gruesos, sumergirlos en la masa y freírlos en aceite de oliva virgen extra que no esté excesivamente caliente hasta que estén dorados.
Conforme se fríen los soldaditos de pavías, los vamos sacando y poniendo en un plato con papel absorbente para retirar el exceso de aceite.
Y ya lo tenemos listo para degustar, a este aperitivo le va muy bien como guarnición la ensaladilla de pimientos asados ó tambien una ensaladilla rusa, ó nuestra típica Pipirrana de Jaén.
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