El conejo al ajillo pastor es otro de los clásicos de nuestra familia, se puede decir que nos encanta a todos, sobre todo acompañado de unas patatas fritas y un buen pan para mojar sopas, porque la salsa está riquísima.
Esta receta me llegó a través de mi cuñada Puri, hermana de la Lela, que fué la que me la facilitó en un principio, aunque como hago con casi todas las recetas, luego le puse algo de mi cosecha particular, pero el origen es de mi cuñada, a la que también le agradezco su aportación a este blog.
Esta salsa, la verdad es que va bien con cualquier tipo de carne, yo la he hecho con conejo, con pollo, con cordero, con choto, y con todas está exquisita.
En cuanto a la guarnición, es una forma de cortar las patatas diferente, cuyo origen es francés "pont neuf" es un puente de París, es el puente más antiguo que se conserva en esta ciudad y es el que le dá nombre a esta forma de cortar las patatas y a esta forma de cocinarlas.
Para su realización utilizo los siguientes
Ingredientes: (para 4 personas)
Elaboración:
En una cazuela con aceite se frien primero los dientes de ajo, enteros y golpeados, al objeto de que el aceite se vaya aromatizado, menos un diente que se deja crudo, se pela y se echa directamente en el vaso de la batidora. Cuando están fritos los demás, se sacan y cuando se enfrien un poco, se pelan y se echan también en el vaso de la batidora y se reservan.
En ese mismo aceite se fríe a continuación la rebanada de pan (picatoste), y cuando está frita se echa en el vaso de la batidora reservándola también.
En el mismo aceite se fríen las almendras, con cuidado de que no se nos quemen, retirando la sarten del fuego si fuera necesario y se reservan también en el vaso de la batidora.
A continuación. y en el mismo aceite echamos el conejo, junto con su hígado, salamos y lo tenemos hasta que se dore un poco la carne. Cuando el hígado esté frito se saca y se incorpora también al vaso de la batidora.
Mientas la carne se sigue haciendo, cogemos el vaso de la batidora donde hemos reservado todo y se le añade pimienta al gusto, colorante, perejil, vino blanco y agua. Se bate todo y se echa a la sarten donde se está haciendo el conejo, se cubre con un poquito más de agua y se corrige de sal si fuera necesario, y cuando rompa a hervir, bajamos el fuego y lo tenemos cocinando a fuego lento hasta que la carne esté blandita y la salsa haya engordado un poco.
Lo suyo es acompañarlo con unas patatas fritas ó de un puré de patatas. Hoy lo he acompañado con unas patatas fritas "Puente Nuevo".
Para ello, mientras se va cocinando el conejo, en otra sarten aparte, pelamos las patatas y las cortamos en bastones de unos 6-7 cm. de largo y 1 cm. de ancho, las ponemos en una sarten, las cubrimos con aceite y las ponemos a fuego muy lento (entre 120 y 140º), y las cocinamos durante 10-15 minutos, hasta que las pinchemos y estén tiernas. Entonces las sacamos, las salamos, las escurrimos y las reservamos así hasta la hora de concumirlas.
Llegado el momento, en la misma sarten que las hemos caramelizado, calentamos el aceite y cuando esté muy fuerte (entre 180 y 190º), echamos las patatas hasta que se pongan doraditas por fuera.
Las sacamos y las ponemos sobre papel absorvente y ya están listas para consumir.
Éste sería el aspecto final de nuestro conejo al ajillo pastor con patatas "Puente Nuevo".
La última recomendación es que no se os olvide comprar pan porque está exquisito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario